Capítulo #1 "Junta."

Zyra les miró y suspiró.
-Me da igual, sólo apúrense.-

Alice miraba unas rosas cercanas a la entrada. Tomó una, y volvió.
-Lo mejor es matarlos.- Dijo como ausente. Sólo se le veía el ojo no cubierto, y con éste miraba a la rosa roja.


Ahri estaba aún sorprendida por ese extraño chico de la noche anterior, Koichi. Estaba algo distraída pensando mientras cocinaba. Estaba en el restaurante y habían varios pedidos a esa hora.

Alice continuó. Ahora arrancaba los pétalos, lentamente, como para que le doliera a la flor.
-Así no hay cargas. Ni obstáculos. Ni gritos. Ni llantos. En cuanto no los necesitas, te deshaces de ellos, y las cosas son más simples.- Dijo, cuando ya había arrancado 3/4 partes de la flor. Hablaba lento, acompasando la voz con los pétalos caídos. -Quién sabe si dentro de poco es lo que yo haré.- Ya había arrancado todos los pétalos. Los miró, en el suelo, y luego contempló la flor, como desnuda, sin protección. La agarró en dos y, lentamente, la partió en dos con las manos, clavándose las espinas en las palmas, haciendo que sangraran sin mostrar expresión alguna.
-Acabé con tu sufrimiento.- Murmuró, mirando a la flor. La tiró al suelo. -Pero aún así no he escuchado que me agradecieras.- Dijo, y la pisó. No levantó la cabeza hasta un momento después. Sólo miraba con su ojo descubierto.
-Cuántas veces te he dicho que no arruines las flores?!- Una mujer medio gordita vestida de jardinera se le acercó. -Alice, no hagas eso!- Dijo, y buscó una excusa. -Que les duele mucho!-
Alice levantó la mirada lentamente hacia ella. La mujer tuvo un escalofrío. Posiblemente porque no le veía nada más que el ojo, o porque sus palmas sangraban bajo sus guantes, los cuales estaban teñidos de rojo.
-Es por eso por lo que lo hago.-

Sasuke iba viendo el suelo, estaba pensando en lo ultimo que había sucedido, la batalla con aquella chica había sido innecesaria y una perdida de tiempo según su pensamientos, aquella disputa le había costado energía, tanto mágica como vital, echo un suspiro, iba a ir a comer a un restaurante.

Alice miraba al vacío.
-Yo no sufro. Por dentro nada me importa. Y por fuera sólo siento el dolor como algo físico. No me afecta.- Dijo, y dicho esto se pegó ella misma un puñetazo en la boca y la nariz. Se vió un poco de sangre en el barbijo. -Y la flor debe sufrir. Debe pagar.-


Ahri seguía cocinando.
-No te distraigas Ahri. Que hay muchos pedidos.- Le avisó su padre.
-Sí, to-chan~...- Dijo ella, yendo más rápido.

Sasuke entro en el restaurante, ya se le había abierto de forma notable el apetito, fue a tomar una mesa para ver el menú y saber que ordenar, puso su codo sobre la mesa y apoyo su mejilla en la palma de su mano, miraba lo que iba a comer, hasta el momento no se decidía.

-Hipócrita como todos los humanos.- Dijo de manera normal, con la misma voz monótona de siempre. -No son los humanos los que pagan sus frustraciones con otras personas? Mis padres pagan sus amarguras conmigo. Mis hermanos pagan sus enfados conmigo. La gente paga sus penas y pecados conmigo. Entonces las flores pagarán por todo lo que yo vivo.- Dijo con la voz de siempre. La jardinera la miró con algo de tristeza. Le acarició levemente la cabeza, gesto que Alice ignoró, como si solo fuera viento, y la mujer se fue a seguir con su trabajo, algo pensativa.


-Vamos Ahri, sal a atender.-
-Voooy~...-
Ahri se puso el delantal. Fue tomando órdenes hasta parar en la mesa de Sasuke.
-Disculpe señor, qué desea?- Preguntó con la misma sonrisa de siempre. Con su bloc de notas no lo veía. Estaba ocupada revisando unas notas.

Zyra ya estaba lista para el viaje. También se iban los hijos de Kass y Seph, pero éstos dos se quedaban. Cuando se terminaron de despedir, Zyra miró a Alicia y demás.
-Están listos?-


-Ya tiene su pedido?- Preguntó Ahri. Aún no le había reconocido. Estaba distraída pensando.

-Bien.-
Zyra se puso a caminar. Muy pocos hablaban. Todos querían salir de aquella gélida isla.
Las cosas se animaron cuando llegaron a la isla Luz. De repente todos hablaban entre ellos a excepción de unos pocos.


-Perfecto señor. Su comida estará en...- Ahri le miró y le reconoció. Se le cayó el bloc de notas pero lo recogió al instante.
-Qué estás haciendo aquí?!- Le murmuró, para no llamar la atención.

Arya se puso a reír al escuchar la conversación. Alice la miró confundida, sin saber bien qué hacía.
-Ya llegamos.- Cuando Zyra entró en el comité de Magos recibió instrucciones. Al salir los miró a todos.
-Vamos a quedarnos todos en el alojamiento del clan de Magos. Ahí entrenaréis, y ayudaréis a reclutar a más miembros. Cuando todos estéis listos y entrenados, ayudaréis a buscar los diamantes, entendido?-
-Entendido.- Dijeron la mayoría de hijos de la casa Korthel.


Ahri frunció el ceño.
-Estás en el restaurante de mi familia, así que cállate si no quieres que haya veneno de rata en tu pedido. No hagas ningún problema.- Le murmuró. -Ya me voy a hacer tu pedido.- Dijo algo molesta, y se fue a la cocina.

Zyra emprendió la marcha otra vez.
-Venga, vamos.-


Ahri llegó con la comida y se la dejó en la mesa.
-Aquí tiene.- Dijo, un poco más animada. -Luego le traigo la cuenta si quiere.- Dijo, ignorando que Sasuke estaba levantado.